Después de unos maravillosos días de descanso nos ha tocado volver a la dura realidad… los atascos, el estrés del trabajo, el corre aquí corre haya,…
Como suele ser habitual, nada más llegar la nevera vacía, y al ser domingo San Mercadona cerrado, así que recurrimos a Carrefour para comprar lo mínimo para subsistir, porque aunque soy fiel a Mercadona por calidad, precio y el famoso etiquetado “Sin Gluten”, no me quedo más remedio.
Como con todo, no está mal de vez en cuando innovar, porque descubres cosas nuevas que yo no sabía ni que existían, en la sección de refrigerados encontré San Jacobos, escalope de ternera rebozado, albóndigas de pavo, croquetas, … Todo Sin Gluten. Ilusa de mi cuando pase por delante y vi los nuggets con forma de corazón y caritas tan monas, pensé “ojala lo hubiese sin gluten” cuál fue mi sorpresa al ver un cartel indicando que era todo sin gluten y unos precios muy razonables, 2 €, 1.5 €,… Así ¡no compensa hacerlo en casa!

En mi ruta por el desconocido Carrefour encontré también las famosas bolsas para poder usar una tostadora familiar, y no tener una especial para el celiaco, lo había leído por las redes sociales, pero nunca las había visto en el super, así que si las necesitáis ya sabéis donde encontrarlas, en la sección del papel higiénico.
Por supuesto también aproveche y compré Proceliac, que en Carrefour el único sitio donde lo encuentro. Aunque os aviso que ya se puede comprar por internet, para los que no tengáis un Carrefour cercano. (Pincha aqui)
Y después de cargar mi carro con un cargamento de productos Schär y Genius, llegue a la conclusión que voy a escribir a Mercadona porque no entiendo que se preocupen tanto por el etiquetado de productos sin gluten, y no nos ofrezcan variedad en productos específicos para celiacos; el que tenga que ir a otro hipermercado a por las galletas Schär y a por Proceliac, implica que al final la compra de esa semana la hago en Alcampo o en Carrefour, así que me pierden de clienta,.. ellos verán…
Y por el momento este es mi aterrizaje a la vida real, a ver si me sitúo un poco y me pongo a bloguear y contaros mis experiencias sin gluten veraniegas. ¡Que han sido muchas y fantásticas!.